domingo, 28 de febrero de 2010

Santiago de Compostela.- Febrero de 2010


Y por fin Santiago. A las 10 de la mañana ya estamos en el hotel, en la plaza de Galicia y el coche en el aparcamiento. Hemos venido temprano con la idea de llegar con tiempo a la misa del peregrino, temiendo las colas. Pero con el dia que hace, tan horroroso, con lluvia y viento no hay colas, y casi ni gente. Saludamos a Santiago solos y en la catedral apenas un par de colegios.

La misa, un poco desangelada y menos vistosa que otras veces. Una monja con una preciosa voz nos ameniza la ceremonia. El botafumerio es afrecido, hoy, por una asociacion de empleados de Caixa Galicia. Al dia siguiente fue la Federacion de Futbol con el Pte. a la cabeza. Y despues de misa a hacer turismo, que hay mucho que ver y la novia de mi hijo, Rocio, es la primera vez que viene a Santiago


Solo un dia completo en Santiago, no dan para mucho y si encima tenemos el inconveniente de la lluvia torrencial, el tiempo se hace mas corto. Solo vimos la Catedral y callejeamos por el centro historico, la Alameda incluida. Ah y a la mañana siguiente, el mercado de abastos de la ciudad, donde compramos productos gallegos para familiares y amigos. A ver si la proxima visita cunde mas. Sera, si Dios quiere el 29 de abril pues tenemos el Campeonato de España de Badminton en La Coruña y seguro que nos pasaremos por Santiago. Ya os lo contare.
Ah y espero que este anuncio no se malogre. En julio de 2009 al publicar la entrada de Otras visitas a Santiago.- Con las hermanas Cruz terminaba diciendo " Dentro de 10 dias, tres de aquellos matrimonios volveran a Santiago......." No pudo ser. Tres dias antes de nuestra partida, a mi mujer le diagnosticaron un cancer y seis meses despues fallecio. Este viaje de Febrero de 2010 ha tenido por objetivo esparcir sus cenizas por algunos puntos del Camino en los que algun dia fuimos felices, entre Leon y Santiago.
Estoy seguro que Santiago nos ayudo en lo que pudo en todo el proceso y tuvo con nosotros un guiño, al que me tiene acostumbrado. Nos quiso hacer ver que ella estaba con nosotros en la misa del peregrino y nos fuimos a sentar detras precisamente de una bolsa con su nombre repetido por toda la superficie. ¿Casualidad? Este comentario solo lo he puesto aqui, en este sitio, al que se acercaran los amigos y conocedores de Santiago. Seguro que vosotros teneis vuestra opinion. Os pongo la foto de la bolsa.




1 comentario:

  1. Muy emotivo tu relato. Y muy oportuna la bolsa en la Catedral. Realmente sentirias que tu mujer estaba alli.
    Saludos.

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