Salimos como siempre a las 6,30, Miguel y yo. Entrena no puede seguir. No ha mejorado nada y asi es imposible.Tomara un autobus para Madrid y se va al mediodia. Ya no lo volveremos a ver. Llevamos un buen ritmo y no paramos hasta Viana donde, con el cafe con leche grande de todos los dias me como el mejor pincho de tortilla que me he comido nunca. Que rico. Cruzamos por la calle Mayor y aprovecho para comprar un poco de fruta para el camino. Un poco antes de llegar a Logroño nos paramos en el famoso puesto de higos de Felisa, donde por 100 pesetas te dan conversacion, higos y te sellan la credencial. Una vividora del camino, pero no esta mal. Llegamos a Logroño y lo atravesamos de punta a punta, cruzamos el Ebro por el gran puente y la salida se nos hace larguisima y ademas con hambre. Un poligono industrial grandisimo e inhospito, menos mal que al final en una gasolinera me compro unas latas de cerveza y me pongo como el quico. 
Un ratico de descanso y seguimos ruta atravesando un parque periurbano de Logroño: La Grajera, un parque inmenso, muy bien equipado y perfecto para pasear. Subimos el alto de la Grajera y alli nos sorprende la primera tormenta, y digo nos sorprende porque ni nos dio tiempo a ponernos los impermeables. Y ya vi que no iba preparado para el agua. El pantalosn impermeable medio medio, pero la parte de arriba se calaba y ademas no traspiraba nada por lo que era insoportable caminando. Algo tendria que hacer.
Llegamos a Navarrete a las 17 horas, muy tarde y con una media bastante floja. El paso de Logroño ha pasado factura. El albergue muy bueno, de lujo de 3 pisos y muy bien equipado, hasta secadora y el hospitalero, mejor Es Felix, pendiente siempre de los peregrinos y muy simpatico. Me mira la ampolla, me recomienda ue descanse algun dia y charlamos largo rato. Le llama la atencion el apellido Canales, pues el es de un pueblo que se llama Canales de la Sierra de La Rioja, al igual que la señora Felisa, la de los higos, a la que por cierto criticaron mucho en el albergue de Logroño.
Vemos el pueblo, que esta bastante bien, foto con el alfarero del monumento
y la cena en el bar que habia bajo el albergue donde en la sobremesa me tomo un par de cubatas con Felix, viendo un partido de baloncesto del Real Madrid, que pierde por cierto, y charlando amigablemente echamos una velada placentera. Y a dormir que hoy han sido 40,8 kilometros del ala.
Un ratico de descanso y seguimos ruta atravesando un parque periurbano de Logroño: La Grajera, un parque inmenso, muy bien equipado y perfecto para pasear. Subimos el alto de la Grajera y alli nos sorprende la primera tormenta, y digo nos sorprende porque ni nos dio tiempo a ponernos los impermeables. Y ya vi que no iba preparado para el agua. El pantalosn impermeable medio medio, pero la parte de arriba se calaba y ademas no traspiraba nada por lo que era insoportable caminando. Algo tendria que hacer.Llegamos a Navarrete a las 17 horas, muy tarde y con una media bastante floja. El paso de Logroño ha pasado factura. El albergue muy bueno, de lujo de 3 pisos y muy bien equipado, hasta secadora y el hospitalero, mejor Es Felix, pendiente siempre de los peregrinos y muy simpatico. Me mira la ampolla, me recomienda ue descanse algun dia y charlamos largo rato. Le llama la atencion el apellido Canales, pues el es de un pueblo que se llama Canales de la Sierra de La Rioja, al igual que la señora Felisa, la de los higos, a la que por cierto criticaron mucho en el albergue de Logroño.
Vemos el pueblo, que esta bastante bien, foto con el alfarero del monumento
y la cena en el bar que habia bajo el albergue donde en la sobremesa me tomo un par de cubatas con Felix, viendo un partido de baloncesto del Real Madrid, que pierde por cierto, y charlando amigablemente echamos una velada placentera. Y a dormir que hoy han sido 40,8 kilometros del ala. 
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